Celebración en Córdoba por los 175 años de la Iglesia Evangélica Metodista Argentina

El sábado 20 de agosto a las 20 hs. se llevará a cabo una celebración cultural y el domingo 21 a las 10 hs. un Culto de Acción de Gracias en el templo de calle Lima 171.

En el marco de los 175 años de vida de la Iglesia Evangélica Metodista en la Argentina hacemos partícipe a la ciudad de Córdoba y sus autoridades municipales y provinciales en su conjunto, del festejo a llevarse a cabo el próximo 20 de agosto, a las 20hs. en la Iglesia Metodista del Centro, cita en calle Lima 171. A través del canto de distintas agrupaciones corales y folclóricas representativas de nuestra cultura, daremos testimonio del acompañamiento de nuestra iglesia en todo el quehacer social – político y religioso de la Argentina. Los actos conmemorativos por el aniversario de la Iglesia Metodista en distintos lugares del país, han sido declarados de interés público nacional por la Secretaría de Cultos de la Nación.

Del mismo modo, invitamos a todos los cordobeses y cordobesas y sus autoridades civiles y religiosas, a unirse a la celebración cúltica que se llevará a cabo el domingo 21 de agosto a las 10hs. en el citado templo.

Queremos recordar que, La Iglesia Metodista que nace en la Inglaterra del S. XVIII como un movimiento de renovación dentro de la Iglesia Anglicana, estuvo desde sus comienzos comprometida con la lucha por la dignidad de las personas, el trabajo a favor de la justicia social y distributiva, la igualdad de oportunidades y la vida plena y abundante, tal como la describen los textos bíblicos. Es por ello que encontramos desde los comienzos a sus predicadores mezclándose con los mineros y los trabajadores de la incipiente Revolución Industrial, bregando por la educación en las escuelas dominicales, luchando por el fin de la esclavitud y defendiendo la libertad de expresión y de conciencia, en épocas en las que las diferencias sociales, la superioridad racial y de clase de unos sobre otros y la falta de acceso a la educación y de derechos sociales y económicos estaban absolutamente naturalizados, y hasta justificados por alguna lectura irracional de la Biblia, realizada desde el poder y con absoluta desconsideración por los que estaban fuera de los círculos privilegiados.